Soldado de cristal

Una estrella ha caido desde el cielo. Estoy viviendo en un sueño, quiero despertar y no puedo. Quiero olvidarte, pero estoy controlada por mi deseo.
Camino hacia el peligro, temo caer al vacío, mi destino es la locura, la única que sacia el deseo. Yo, una esclava de mis sentimientos y tú, soldado, te enfrentas conmigo y combates con tu espada, que es tu indiferencia. Ganas la batalla, pero yo peleo sin razón, porque haces que mi cabeza se subordine al amor. Juegas conmigo, y me dejo ser tu marioneta. No soy conformista, pero solo con una de tus miradas sacias mi hambre. Quiero ahogarme en tus besos, quiero arder en nuestra pasión.
Eres fruta prohibida, manjar de la tentación. Me absorves, me tienes abducida, pero sigo bebiendo de tu jugoso veneno.
Soy una esclava del deseo. Una adicta a la perdición.

Sin ti, poesía...

A dónde caminan mis sentidos, no lo se. Quizás a donde el corazón pierdo. Es allí donde plasmo la mirada, pero no te veo a ti, es solo un reflejo. Una silueta que el viento dibuja, arrastrado por mi imaginación. Don de la palabra que pones disfraz a mis sentimientos. No encuentro líneas que expliquen lo que siento; ni tampoco sentimientos que expresen lo que escribo. Dueña de mis letras se ha hecho la poesía, un mundo de letras llenas de sabiduría. Escondidas en su guarida me salpican con su encanto. Llenan de armonía allá por donde ellas anden.
Mundo de la palabra, no encuentro la salida.

No hay escapatoria...

"Sin la poesía no hay vida.
Sin amarte, estoy perdida."